Un arco recurvo es un arco con extremidades que se curvan en dirección opuesta al arquero cuando se destensa. Un arco recurvo almacena más energía y entrega energía de manera más eficiente que el arco de extremidad recta equivalente, dando una mayor cantidad de energía y velocidad a la flecha. Es característica la forma del arco, que tiene ambas palas con una forma curva, como haciendo una S y que provoca que la cuerda toque la pala en dos puntos. Esta forma de las palas permite optimizar la velocidad de salida de la flecha así como su precisión; por ello estos arcos constituyen un avance sobre los arcos rectos tradicionales o longbow. Un arco recurvo permite un arco más corto que el arco de extremidad recta simple para una energía de flecha determinada y esta forma a menudo era la preferida por los arqueros en entornos donde las armas largas podían ser engorrosas, como en terrenos de matorrales y bosques, o mientras iban a caballo.
Las palas curvadas también ejercen mayor presión sobre los materiales utilizados para hacer el arco y pueden hacer más ruido con el disparo. Los recurvos extremos hacen que el arco sea inestable cuando se encorda. Un arco recurvo sin cordaje puede tener una forma confusa, y muchas armas de los nativos americanos, cuando se separaron de sus propietarios y culturas originales, se montaron incorrectamente hacia atrás y se destruyeron cuando se intentó dispararlos.[1][2]