La Baja Edad Media constituye el último periodo de la Edad Media y comprende los siglos XIV y XV —aunque algunos historiadores sitúan su comienzo en el siglo XI negando la existencia del periodo de la Plena Edad Media (siglos XI al XIII)—[1] y no faltan quienes consideran que la Baja Edad Media engloba a la Plena Edad Media como una etapa primera, mientras estos últimos siglos sería la etapa de la Crisis de la Edad Media.[2] Estuvo marcada por la crisis desencadenada por el impacto de la peste negra iniciada en 1348 y que redujo la población europea a menos de la mitad.