Los beneficios laborales o beneficios sociales[1] incluyen varios tipos de compensaciones provistas por los empleadores en adición a los salarios regulares.[2] Estos beneficios pueden ofrecerse como incentivos adicionales para mejorar el bienestar de los empleados y aumentar la competitividad de la empresa.[3]
En las situaciones en las que los empleadores intercambian dinero por estos beneficios, se les conoce como retribución flexible. En muchos países, algunos beneficios laborales están sujetos a impuestos, mientras que otros gozan de exenciones fiscales tanto para empleados como para empresas.