Las cefalosporinas son antibióticos del grupo de los beta-lactámicos derivados semisintéticos de la cefalosporina C. Son semejantes a las penicilinas, pero difieren de ella en que el ácido 6-aminopenicilánico ha sido sustituido por un ácido-7-cefalosporánico. Son más estables ante muchas β-lactamasas bacterianas y, por lo tanto, tienen un espectro de actividad más amplio.[1][2][3]
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no válida; no se ha definido el contenido de las referencias llamadas Kong2010
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no válida; no se ha definido el contenido de las referencias llamadas Kim2014