La cruz invertida, cruz de San Pedro o cruz petrina, es un símbolo cristiano que representa la forma en la que, según la tradición, fue crucificado San Pedro, es decir cabeza abajo.
Esta cruz invertida se ha convertido en un símbolo de humildad y servicio, que es central en la misión del Papa como sucesor de San Pedro. Por ello, en muchos actos públicos el Papa traza la señal de la cruz de San Pedro durante bendiciones públicas o liturgias.[1]
En tiempos recientes, producto de la moda y las películas de Hollywood, se ha relacionado la cruz invertida con el satanismo o la aversión al cristianismo.