Deus ex machina en la tragedia Medea de Eurípides (2009, Siracusa, Italia)
Deus ex machina[1] es una locución latina que significa «el dios [que baja] de la máquina»,[2] traducción de la expresión griega «ἀπὸ μηχανῆς θεóς» (apò mēchanḗs theós), o mejor entendido como "por obra de Dios".[3] Se origina en el teatrogriego y romano, cuando una grúa(machina) o cualquier otro medio mecánico introducía desde fuera del escenario a un actor que interpretaba a una deidad(deus) para resolver una situación o dar un giro a la trama.[4]
Actualmente se utiliza para referirse a un elemento externo que resuelve una historia sin seguir su lógica interna. Desde el punto de vista de la estructura de un guion, deus ex machina hace referencia a cualquier acontecimiento cuya causa viene impuesta por necesidades del propio guion, a fin de que mantenga lo que se espera de él desde un punto de vista del interés, de la comercialidad, de la estética o de cualquier otro factor, incurriendo en una falta de coherencia interna.[5] Fuera del mundo teatral, se trata de un personaje o acontecimiento inesperado que aporta una solución oportuna a una situación dramática.
↑Real Academia Española. «deus ex machina». Diccionario de la lengua española (23.ª edición).
↑En comedia se usaba una máquina similar para hacer aparecer actores en el escenario, que recibía el nombre de κράδη ‘rama’ según julio Pólux (4.128).
↑Ceccarelli, Marco (2004). International Symposium on History of Machines and Mechanisms. Kluwer Academic Publishers. ISBN1-4020-2203-4. «In some ancient Greek drama, an apparently insoluble crisis was solved by the intervention of a god often brought on stage by an elaborate piece of equipment. This "god from the machine" was literally a Deus Ex Machina.»
↑«Deus ex Machina». Figuras literarias. Archivado desde el original el 1 de marzo de 2016. Consultado el 25 de febrero de 2016.