← 2014 • • 2024 → | |||||||||||
Elecciones generales de 2019 57 de 65 escaños de la Asamblea Nacional 29 escaños necesarios para la mayoría | |||||||||||
Fecha | Miércoles 23 de octubre de 2019 | ||||||||||
Tipo | Parlamentaria | ||||||||||
Período | 2019-2024 | ||||||||||
Duración de campaña | 22 de septiembre a 22 de octubre de 2019 | ||||||||||
Demografía electoral | |||||||||||
Población | 2 499 701 | ||||||||||
Hab. registrados | 925 478 | ||||||||||
Votantes | 778 343 | ||||||||||
Participación | |||||||||||
84.15 % 0.6 % | |||||||||||
Votos válidos | 772 158 | ||||||||||
Votos nulos | 6185 | ||||||||||
Resultados | |||||||||||
BDP | |||||||||||
Votos | 406 561 26.8 % | ||||||||||
Escaños obtenidos | 38 1 | ||||||||||
52.65 % | |||||||||||
UDC | |||||||||||
Votos | 279 594 19.7 % | ||||||||||
Escaños obtenidos | 15 3 | ||||||||||
35.88 % | |||||||||||
AP | |||||||||||
Votos | 39 561 | ||||||||||
Escaños obtenidos | 1 | ||||||||||
5.12 % | |||||||||||
BPF | |||||||||||
Votos | 34 028 | ||||||||||
Escaños obtenidos | 3 | ||||||||||
4.41 % | |||||||||||
Otros partidos e independientes | |||||||||||
Votos | 14 224 | ||||||||||
Escaños obtenidos | 0 | ||||||||||
1.94 % | |||||||||||
Resultado por circunscripción | |||||||||||
Composición de la Asamblea Nacional | |||||||||||
Presidente de la República de Botsuana | |||||||||||
Las elecciones generales de Botsuana de 2019 tuvieron lugar el 23 de octubre del mencionado año con el objetivo de renovar los 57 escaños electos de la Asamblea Nacional, ejerciendo estos sus funciones por el período 2019-2024 e invistiendo al presidente de la República. Se trató de los undécimos comicios que tenían lugar en Botsuana desde la independencia del país del Reino Unido en 1966, y los duodécimos desde la instauración del sufragio universal. Se realizaron al mismo tiempo que las elecciones de gobierno local.[1] Se empleó el sistema de escrutinio mayoritario uninominal y la edad mínima para votar fue de dieciocho años. Las elecciones fueron administradas por la Comisión Electoral Independiente (IEC). Fue la cuarta y última vez que hubo 57 escaños electos, concluyendo el período más largo en el que el legislativo botsuano ha tenido la misma cantidad de escaños.[2]
Se trató de los primeros comicios luego del retiro del presidente Ian Khama en abril de 2018, luego de cumplir diez años en el cargo, y su reemplazo por el presidente Mokgweetsi Masisi. Luego de que la principal coalición opositora, el Paraguas para el Cambio Democrático (UDC), liderada por Duma Boko, llegara a un acuerdo que condujo la integración del tercer partido más grande del país, el Partido del Congreso de Botsuana (BCP), a la alianza, se pronosticaba que los comicios serían un duro desafío para el Partido Democrático de Botsuana (BDP), gobernante desde la independencia.[3] Mientras tanto, el Movimiento por la Democracia de Botsuana (BMD) se separó de la UDC luego de rechazar ceder las circunscripciones que tenía asignadas,[4][5] mientras que un sector de este liderado por Ndaba Gaolathe se escindió y fundó la Alianza para los Progresistas (AP) que presentó varios candidatos en solitario.[6] El año anterior a las elecciones se caracterizó por un persistente conflicto entre Khama y Masisi, que invirtió muchas de las políticas más criticadas de su predecesor.[7] A principios de 2019, Khama abandonó el BDP y apoyó la fundación del Frente Patriótico de Botsuana (BPF), partido con base en los antiguos bastiones del BDP en los territorios BaNgwato del centro y este del país. En las circunscripciones donde el BPF no pudo presentar candidatos o no tenía probabilidades de ganar, Khama recomendó sorpresivamente votar por la UDC.[8]
Contra todo pronóstico, el BDP revalidó su mayoría por amplio margen recibiendo un 52,65% de los votos válidamente emitidos y ganando 38 de los 57 escaños electos, uno más que en las anteriores elecciones, contra un 35,88% y 15 escaños de la UDC, dos menos que en 2014.[2] En términos territoriales, la elección constituyó un realineamiento territorial sin precedentes en la historia electoral botsuana: el BDP arrebató a la oposición la totalidad de los escaños en la capital, Gaborone, y arrasó en las regiones sureñas antes firmemente opositoras, siendo la primera vez desde la muerte de Seretse Khama que el partido lograba ganar en la capital. Mientras tanto, la UDC se impuso en el norte del país y logró conquistar algunos escaños del centro que antes habían sido firmes bastiones del oficialismo, pero perdió en más de la mitad de las circunscripciones que había ganado en 2014. Con un buen desempeño en áreas urbanas, la AP ganó el distrito de Francistown South y fue la tercera fuerza más votada con un 5,12% de los votos, mientras que el BPF logró el 4,41% y ganó del BDP las tres circunscripciones de Serowe, región natal de Khama. El BMD obtuvo solo el 0,27% de los votos y ninguno de sus candidatos resultó electo. Al igual que en las anteriores elecciones, la participación se mantuvo alta, con un 84,10% del electorado registrado concurriendo a votar.[2]
Considerado una sorpresa política, el resultado se atribuyó en gran medida a una buena recepción de los gestos conciliatorios que tuvo Masisi en sus primeros meses en el cargo para con sectores que habían estado fuertemente enfrentados con Khama, como los sindicatos (cuyo respaldo había sido clave para el declive del BDP y los éxitos electorales de la oposición en 2014), así como al simultáneo desprestigio que representó para muchos electores tradicionalmente opositores el aparente acuerdo entre el liderazgo de la UDC y Khama, sumamente impopular entre los votantes urbanos y la juventud.[9][10] La derrota de Boko en su circunscripción de Gaborone Bonnington North significó que no pudo retener el cargo de líder de la Oposición, mientras que la pérdida de apoyo en el sur implicó que la abrumadora mayoría de los parlamentarios electos de la UDC pertenecieran al BCP (más fuerte en el norte), permitiendo a su líder, Dumelang Saleshando (electo en Maun West) asumiera el cargo.[9]
Aunque los observadores internacionales calificaron las elecciones como «libres y justas»,[11][12] Boko se negó a reconocer la victoria del BDP, afirmando que había «discrepancias electorales masivas» y anunció que impugnaría los resultados ante los tribunales.[9] Su impugnación fue inicialmente desestimada por el Tribunal Superior en diciembre, pero Boko apeló con éxito ante el Tribunal de Apelaciones a principios de enero de 2020.[13] Sin embargo, en la audiencia plena celebrada a finales de enero, el Tribunal de Apelaciones desestimó las peticiones sobre la base de que no tenía competencia suficiente para esto.[14]