El enverdecimiento del desierto, reverdecimiento del desierto o reverdecer el desierto es el proceso artificial de forestación o revegetación de los desiertos para detener su avance, aprovechar las tierras recobradas para la agricultura y la silvicultura sostenibles, y recuperar los sistemas de agua natural y otros servicios del ecosistema. El término "reverdecimiento del desierto" puede aplicarse tanto a los desiertos áridos y semiáridos fríos como a los cálidos (consultar el sistema de clasificación climática de Köppen). No se aplica a las regiones cubiertas de hielo o permafrost. Reverdecer los desiertos puede ayudar a paliar las crisis mundiales de agua, energía, alimentos, clima y migración.[1] Se trata de aproximadamente 32 millones de kilómetros cuadrados de tierra.