El Foundling Hospital (en español, “Hospital de Niños Expósitos”) de Londres (Inglaterra), fue fundado en 1739 por el capitán de barco y filántropo Thomas Coram. Se estableció como un hogar de niños para la "educación y el mantenimiento de las personas en riesgo y niños pequeños." En esa época, la palabra "Hospital" era utilizada en un sentido más amplio a como se la interpreta hoy, y simplemente indicaba una "institución de acogida" para los menos afortunados.