Free Cinema es un movimiento cinematográfico británico que nace en febrero de 1956, a partir del “Manifiesto de los Jóvenes Airados” (Angry Young Men) y se prolonga a lo largo de toda la década de 1960. Conocido también como kitchen sink realism se caracteriza por usar una estética realista en el cine de ficción y en el cine documental, ocupándose de retratar historias inspiradas en lo cotidiano y comprometida con la realidad social de aquel entonces,[1] siendo una reacción a la artificialidad narrativa de Hollywood y al cine británico clásico, demasiado dependiente del sistema de estudios, similar al de la industria norteamericana.
Aunque en ocasiones se ha denominado a este movimiento como la "Nouvelle vague inglesa", cabe decir que esto no es totalmente correcto, pues en su nacimiento fue anterior a esta y posteriormente da lugar a la corriente del cine social inglés, o realismo social británico, cuyo máximo representante es todavía Ken Loach.