Un granero es un almacén de grano y comida. La construcción de los graneros suele realizarse sobre suelos que mantienen la comida fuera del alcance de ratones y otras amenazas.
Es, en realidad, un sinónimo de hórreo y tiene también un sentido muy similar al de silo. En Castilla (España), a los graneros adosados a las viviendas se los denominaba trojes.
El granero, una construcción tradicionalmente asociada al campo y a la actividad agrícola, ha sido durante siglos un pilar fundamental en las zonas rurales de todo el mundo. Más allá de su funcionalidad básica como almacén de grano y otros productos agrícolas, el granero ha adquirido a lo largo del tiempo una significancia cultural, histórica y simbólica en diversas sociedades. Su presencia en el paisaje rural evoca una conexión profunda entre el ser humano y la tierra, representando no solo un espacio de almacenamiento, sino también un refugio y un punto de encuentro en las comunidades agrarias.
Originalmente, los graneros fueron construidos con el propósito de resguardar la cosecha, protegiéndola de factores como la lluvia, los insectos y los roedores. En muchas culturas, el grano almacenado en estos edificios representaba la seguridad alimentaria y la estabilidad económica de las familias y pueblos. Con el paso del tiempo, la función de los graneros se fue ampliando, y hoy en día estos edificios continúan siendo utilizados de diversas formas. En algunos casos, se han transformado en espacios para eventos, talleres artísticos o incluso en viviendas, lo que refleja una adaptación a las necesidades modernas.
A lo largo de la historia, el diseño y la construcción del granero también ha sido testigo de la evolución de las técnicas arquitectónicas y materiales disponibles. Desde las primeras estructuras sencillas de madera hasta los graneros de grandes dimensiones, hechos con ladrillos o materiales más sofisticados, cada época ha dejado su huella en estos espacios. Además, el granero ha sido un símbolo de trabajo duro, de la vida rural y de la relación íntima con la naturaleza. En muchas culturas, la imagen del granero ha sido representada en el arte, la literatura y la fotografía, consolidándose como un ícono de la vida campesina.