Hubo guildas de San Lucas en las ciudades de Amberes, Brujas, Gante, Bruselas, Tournai, Ámsterdam, Haarlem, Utrecht, Delft, Leiden o La Haya. Las primeras guildas fueron las de Amberes y Brujas, y crearon el modelo seguido por las demás. La de Amberes subsistió hasta 1795, aunque ya había perdido la mayor parte de su antiguo poder. Las competencias de estas guildas eran muy extensas, otorgadas por los concejos municipales. Resolvían las disputas y conflictos entre sus miembros, regulaban todos los aspectos del aprendizaje y carrera profesional de los pintores, así como la producción y la comercialización de las pinturas, en un contexto histórico que presenció los inicios del mercado de arte. Pertenecer a una guilda era requisito obligatorio para vender obras de arte o acoger aprendices en un taller.[9] Las guildas poseían un centro propio para la venta y exposición, en el que sus miembros ofrecían sus obras directamente al público.[10] Con el tiempo (sobre todo a partir del siglo XVII) también pasaron a representar a los escultores y a los marchantes, e incluso se admitió en ellas a artistas dilettanti (simples aficionados, pero de alto nivel cultural y social).[11] El celo con el que defendían su oficio podía llegar a medidas como la que adoptó la Guilda de Brujas en 1447: prohibió a los iluminadores usar la técnica del óleo, restringida a los pintores, y les ordenaba limitarse a la acuarela.[12]
↑Mather, Rufus Graves. "Documents Mostly New Relating to Florentine Painters and Sculptors of the Fifteenth Century." In: The Art Bulletin, vol. 30, no. 1. (Mar., 1948), pp. 20–65. Fuente citada en Guilds of Florence. Francesco Adorno, a cura di, Accademie e istituzioni culturali a Firenze, Firenze, Olschki, 1983. Fuente citada en Accademia di belle arti di Firenze
↑"Il Zanetti sostiene che innanzi il 1290 fu stablita in Venezia una Compagnia di pittori sotto la invocazione di S. Luca, di che fanno fede i Statuti che si conservano in S. Sofia: E finalmente il predetto Lanzi ci istruisce, che nel 1349 s'adunavano anche in firenze li pittori in una pia società denominata la Compagnia di S. Luca la cui sede stabilirono prima a S. Maria Nuova, e indi in S. Maria Novella, la quale a torto vien detta dal Baldinucci la prima, che esistesse in Otalia. Questo spirito di unione negli artisti per tutta l'Italia si estese tanto, che anche in Lombardia, ed in Bologna v'ebbero confraternite di simile appellazione." (Melchiorre Missirini, Memorie per servire alla storia della romana Accademia di S. Luca, 1823, pg. 3). Un siglo más tarde, entre 1415 y 1436, se documenta a Jacobello del Fiore presidiendo el gremio de pintores de Venecia (VV. AA., El arte en la Italia del Renacimiento, pg. 507). La denominación más antigua recogida es Arte dei depintori, de 1271, lo que le convierte en el gremio de pintores más antiguo (los había de los oficios de la piedra -Arte dei tagliapietra- y de los de la madera -Arte dei intagliadori-, Patricia Fortini, Arte y vida en la Venecia del Renacimiento, pgs. 41-42).
"Las ordenanzas de la Cofradía de San Lucas de Zaragoza especifican: Ningún oficial de la arte de la pintura de dicha ciudad pueda poseer obrador, ni emprender obra alguna de pintura sin ser primero examinado por los mayordomos y vehedores que en aquel año serán de la dicha arte y Cofradía" (citado por Martín Gonzalez, 1984 y reproducido en Manuel Ruiz, La Escuela Gratuita de Diseño de Barcelona, 1775-1808, pg. 70).
"Las ordenanzas del Gremio de Pintores de Sevilla datan del año 1480" (Ruiz, pg. 70).
"En Barcelona, los pintores se agrupaban en la Cofradía de San Esteban de los Fresneros... en 1516 formarán una nueva cofradía mediante un privilegio que les permitirá agruparse en doradores y pintores de vidrieras. Posteriormente, en 1683, los doradores consiguen fundar una corporación independiente y los pintores, ya con una mayor conciencia de la importancia de su arte, obtienen por privilegio real en 1688 la categoría de artistas o profesores de arte liberal, formándose el Colegio de Pintores de Barcelona" (Ruiz, pg. 70-71).
La Hermandad de San Lucas de Sevilla "tenía su sede a comienzos del siglo XVII en una capilla ... junto a San Antonio Abad. Se reunían por lo general una vez al año... elegirían a sus representantes y resolverían los problemas concernientes al gremio y al oficio de pintor, sobre todo el derivado del pago de las alcabalas, verdadero quebradero de cabeza para todos los artistas españoles... estaba formado según las ordenanzas por cuatro oficios, como eran los de imagineros, doradores, pintores de madera y de fresco, y los sargueros" (Luis Méndez, Velázquez y la cultura sevillana, pg. 96). Véase también Lucas Valdés.
↑Jules Guiffrey, Livrets des expositions de l'Académie de Saint-Luc à Paris pendant les années 1751, 1752, 1753, 1736, 1762, 1764 et 1774, avec une notice et une table, (1915), Librairie des Arts et Métiers, Nogent-le-Roi, 1991, fuente citada en fr:Académie de Saint-Luc
↑"El primer documento que permite hablar sin ningún género de dudas de la existencia de una academia artística en suelo peninsular se remonta a 1603 y corresponde a la llamada Academia de San Lucas de Madrid. También están perfectamente documentadas otras academias establecidas en Barcelona, Valencia y Sevilla, al parecer esta última la más importante de ellas." (El siglo XVII. Los orígenes del academicismo español)