Imperial y real (en alemán: kaiserlich und königlich, más conocido por sus siglas k. u. k.) fue un título y un tratamiento usado por el monarca regente del Imperio austrohúngaro de la dinastía de los Habsburgo.[1] A pesar de su nombre en español, la unión austrohúngara no era un imperio propiamente dicho, sino una monarquía dual, por lo que el título de emperador y el adjetivo «imperial» en sí solos no bastaban para describir la jurisdicción compartida, pues aunque Austria y los territorios del Consejo Imperial se definían como imperio, Hungría seguía manteniendo la calificación de reino.[2] De ahí que el monarca y las instituciones compartidas por ambos Estados recibieran la calificación de «imperial y real» (en nombres propios, Imperial y Real en mayúscula). En el sentido mas amplio, el término se refiere a la corte de los Habsburgo desde una perspectiva histórica, pues se solía usar —con distintos matices (principalmente las siglas k. k.)— anteriormente a la existencia de Austria-Hungría.[2]