La ley n.º 94-665 del 4 de agosto de 1994 sobre el uso de la lengua francesa,[1] más conocida como la ley Toubon, en referencia a Jacques Toubon, ministro de cultura de la época, es una ley francesa que hace obligatorio el uso de la lengua francesa en publicaciones gubernamentales oficiales, anuncios, en el lugar de trabajo, en los contratos comerciales, en otros contextos comerciales, en las escuelas financiadas por el estado y en otras situaciones. La ley no se aplica en las comunicaciones privadas o no comerciales.
La ley Toubon persigue tres objetivos principales:
Con ello, se intenta asegurar la primacía del francés en Francia. La ley Toubon también recibe el sobrenombre de ley Allgood, siendo Allgood una traducción morfema a morfema de Toubon o "Tout bon" (Todobueno), ya que se puede considerar que la ley se aprobó como reacción al creciente uso del inglés en Francia, particularmente en los anuncios comerciales.