El liberalismo perfeccionista (o perfeccionismo liberal, aunque no todos los autores usan estos términos como sinónimos) es la combinación de dos ideas: perfeccionismo y liberalismo. Lo que hace que el liberalismo sea perfeccionista es la adopción de una teoría objetiva de la buena vida (o del bienestar humano) y la creencia de que es asunto del Estado (a veces) promover la buena vida de sus ciudadanos o (si una teoría cosmopolita de la justicia es correcta) promover la buena vida de todos los seres humanos. Lo que hace liberal al perfeccionismo es que o bien tiene una teoría de la buena vida que da prioridad al valor de la autonomía o bien tiene una teoría de la buena vida de la que se pueden derivar los derechos liberales clásicos y/o el principio de la neutralidad del Estado (de manera contingente, pero sobre una amplia gama de mundos posibles "cercanos"), o ambos.