Con el nombre de macuquina se conoce en España y en la América Española al tipo de moneda acuñada toscamente en forma manual y a golpes de martillo, método ampliamente utilizado desde el siglo XVI hasta mediados del siglo XVIII. Existen diversas opiniones sobre el origen de la palabra: mientras algunas sostienen que proviene del vocablo árabe "machuch" ('aprobado' o 'sancionado'),[1] otras afirman que proviene de la expresión quechua Makkaikuna —o macay cuna—, que haría referencia a su fabricación a martillazos.[2] También puede provenir de la lengua bantú de los esclavos africanos (que daban los martillazos), en la que Makukin significa Galleta.