Un monitor de estudio se caracteriza por reproducir la señal de audio de forma transparente, es decir, una respuesta plana, sin alteraciones y sin coloración.
Estos monitores, aunque se vendan como respuesta plana, siempre tienen un margen de error, pero siempre será una señal más pura que cualquier equipo hi-fi (Alta fidelidad) que suelen colorear la señal en graves y agudos para hacer un sonido más “redondo” o agradable.