En el vudú haitiano, Papa Legba o simplemente Legba es el protector del mundo espiritual y el mediador entre el hombre y los Loa, que son los espíritus o dioses menores. Se encuentra en una encrucijada espiritual entre permitir (o denegar) el permiso para hablar con los espíritus que habitan en Guinee, que es el mundo de los espíritus, una referencia a la patria africana a donde los esclavos esperaban que sus almas pudieran ser devueltas después de la muerte.[1] Se cree que Legba habla todas las lenguas humanas. Siempre es el primero y el último en la invocación de los espíritus, debido a que su permiso es necesario para cualquier comunicación entre los mortales y la Loa, es aquel que abre y cierra los portales.
Por ello, y para neutralizar el poder que tiene este espíritu, todas las ceremonias vudú se inician con el siguiente canto:
"Oh, buen Legba, escúchame: ábreme la barrera.Papá Legba, ábreme la barrera.
Abreme la barrera para que pueda entrar.
Vudú Legba, ábreme la barrera.
Daré gracias a los loas cuando vuelva.
Ababó".