La piperrada es un acompañante gastronómico de origen francés, más concretamente gascón[1], extendido a la cocina vasca, navarra, riojana y aragonesa, que se sirve generalmente con carnes y pescado. El nombre procede del occitano gascón piperrada, pipèr significando guindilla en este idioma. Es el equivalente de estas regiones del pisto, tan presente en toda la gastronomía española.