En la antigua religión romana, Providentia es una personificación divina de la capacidad de previsión y provisión. Era una de las personificaciones de las virtudes que formaban parte del culto imperial de la antigua Roma.[1] Providentia aparece en el arte, el culto y la literatura, pero su mitología es escasa o inexistente.[cita requerida] .
La Providentia era una importante abstracción moral y filosófica en el discurso romano. Cicerón dice que es uno de los tres componentes principales de prudentia, "el conocimiento de las cosas que son buenas o malas o ninguna",[2] junto con memoria, "memoria", e intellegentia, "comprensión".[3] La palabra latina es el origen del concepto cristiano de providencia divina.