Renacimiento del Weser (en alemán: Weser-Renaissance o Weserrenaissance) es una denominación historiográfica con la que se designa el estilo arquitectónico tardorenacentista, típico del noroeste de Alemania (Bremen, Baja Sajonia y Westfalia y sus alrededores), donde estuvo en boga entre 1520 y 1640[1][2][3][4] y que ha sido bien conservado en los pueblos y ciudades de la región.
Lleva el nombre del Weser (el río que corre desde Hann. Münden, Baja Sajonia, hasta Bremerhaven, estado de Bremen, y que también atraviesa la ciudad de Bremen), a partir de que de este río se extraía la arcilla utilizada para construir los edificios.[4]
El estilo, que combina elementos del Renacimiento italiano con elementos del Renacimiento de Europa occidental, se caracteriza por el amplio uso de gabletes, pináculos, proyecciones, etc.[5] y se utilizó principalmente en la construcción de edificios públicos[4] (castillos, ayuntamientos, etc.).
El término fue acuñado en 1912 por Richard Klapheck.[3] Entre los monumentos más famosos de este estilo, se encuentra el Ayuntamiento de Bremen, incluido en 2004 por la UNESCO en el Patrimonio de la Humanidad.