Se denomina con el término inglés roll-off (literalmente, desplazamiento) a la pendiente de una función de transferencia de frecuencias, particularmente en el análisis de circuitos, y más especialmente en conexión con los circuitos de filtrado en la transición entre una banda de paso y una banda de corte. Por lo general, se aplica a las pérdidas por inserción en una red, pero, en principio, se puede aplicar a cualquier función relevante de frecuencia y a cualquier tecnología, no solo a la electrónica. Es habitual medir la caída de una onda en función de su frecuencia medida logarítmicamente; en consecuencia, las unidades de atenuación son decibelios por década (dB/década), donde una década es un aumento de diez veces en la frecuencia, o decibelios por octava (dB/8va), donde una octava es un aumento de dos veces en la frecuencia.
El concepto de caída se deriva del hecho de que en muchas redes la caída tiende hacia un gradiente constante en frecuencias muy alejadas del punto corte de la curva de frecuencia. La caracterización del "roll-off" permite reducir el rendimiento de corte de una red de filtros de este tipo a un solo número. Téngase en cuenta que la caída puede darse tanto con una frecuencia decreciente como con una frecuencia creciente, dependiendo de la forma de banda del filtro que se esté considerando: por ejemplo, un filtro paso bajo reducirá su atenuación con una frecuencia creciente, pero un filtro paso alto o la banda de corte más baja de un filtro paso banda atenuará en mayor medida las ondas con una frecuencia decreciente. En aras de la brevedad, este artículo describe solo filtros de paso bajo, dado que se pueden aplicar los mismos principios a los filtros de paso alto intercambiando frases como "por encima de la frecuencia de corte" y "por debajo de la frecuencia de corte".