Senaquerib | ||
---|---|---|
| ||
Rey de Asiria | ||
705 a. C.-681 a. C. | ||
Predecesor | Sargón II | |
Sucesor | Esar-hadón | |
| ||
Rey de Babilonia | ||
705 a. C.-703 a. C. | ||
Predecesor | Sargón II | |
Sucesor | Marduk-zakir-shumi II | |
| ||
689 a. C.-681 a. C. | ||
Predecesor | Mushezib-Marduk | |
Sucesor | Asarhaddón | |
| ||
Información personal | ||
Nombre de nacimiento | Śïn-ahhe-eriba | |
Nacimiento |
c. 745 a. C. Nimrud (Imperio neoasirio) | |
Fallecimiento |
20 de octubre de 681 a. C.jul. Nínive (Imperio neoasirio) | |
Causa de muerte | Herida por arma blanca | |
Familia | ||
Familia | Dinastía sargónida | |
Padres |
Sargón II Ra'īmâ | |
Cónyuge |
Naqi'a Tashmetu-sharrat | |
Hijos |
Assur-nadin-shumi Asarhaddón Arda-Mullisu Ashur-ili-muballissu Aššur-šumu-ušabši Nergal-shumu-ibni Nabu-shar-usur Šadditu | |
Información profesional | ||
Ocupación | Soberano, comandante militar | |
Título |
Rey de Asiria y Babilonia “Rey de las Cuatro Esquinas del Mundo” “Rey del Universo” | |
Senaquerib (Acadio: ; Śïn-ahhe-eriba, "Sin ha reemplazado a mis hermanos (perdidos) por mí") fue rey de Asiria desde el 12 de Av (julio-agosto) de 705 a. C. hasta su muerte, el 20 de Tevet (diciembre-enero) de 681 a. C., así como de Babilonia entre 705 y 703, y nuevamente desde 689 a. C. hasta su muerte.
Hijo y sucesor de Sargón II, estuvo ocupado en incesantes conflictos por todo el Creciente fértil durante la mayor parte de su reinado, guerreando con Elam, Urartu y Egipto. Combatió al rey Ezequías de Judá, sitió Jerusalén y arrasó Babilonia tras varias revueltas contra su dominio, la última de las cuales provocó la muerte de su hijo y heredero, Aššur-nādin-šumi, desgracia que acarrearía un conflicto sucesorio, a resultas del cual murió asesinado por dos de sus hijos en una revuelta palaciega. Fue sucedido y vengado por su hijo menor y heredero designado, Asarhaddón.
A pesar de su intensa actividad bélica, sus mayores esfuerzos los dedicó a la arquitectura y las obras públicas. Reconstruyó con colosales proporciones la antigua ciudad sagrada de Nínive, convirtiéndola en la gran capital de Asiria, dotándola de templos, palacios, jardines y murallas, y construyó el acueducto de Jerwan, un gigantesco acueducto para abastecerla de agua.