El sesgo del statu quo es un sesgo cognitivo en el cual se tiene una actitud de preferencia por el mantenimiento del estado de cosas actual o anterior, o una preferencia por no emprender ninguna acción para cambiar este estado actual o anterior.[1]
Las preferencias por mantener el statu quo se relacionan a otros tipos de procesos cognitivos no racionales, como el efecto de anclaje, el efecto de mera exposición o aversión a las pérdidas, en el que las pérdidas se ponderan en mayor medida en comparación con las ganancias.[2][3]