En la mitología griega, la Sibila de Cumas o sibila cumana era natural de Eritras, ciudad importante de Jonia (en la costa oeste de la actual Turquía). Su padre era Teodoro y su madre una ninfa.[1] Se cuenta de ella que nació en una gruta del monte Córico. Nació con el don de la profecía y hacía sus predicciones en verso. Se la conocía como Sibila de Cumas porque pasó la mayor parte de su vida en esta antigua ciudad de la Magna Grecia, en la costa del mar Tirreno, en la actual área metropolitana de Nápoles, Campania, al sur de Italia.[1]