Una tarjeta de valor guardado o tarjeta de valor almacenado es una tarjeta de pagos con un valor monetario almacenado en la tarjeta misma, y no así en una cuenta externa mantenida por alguna institución financiera. Las tarjetas de valor almacenado se diferencian de las tarjetas de débito, donde el dinero es depositado donde el emisor,[1] y las tarjetas de crédito están sujetas a límites de crédito establecidos por el emisor. Otra diferencia entre las tarjetas de valor almacenado y tarjetas de débito y crédito es que las tarjetas de débito y crédito son generalmente emitidas en nombre de la cuenta individual de los titulares, mientras que las tarjetas de valor almacenado pueden ser anónimas, como en el caso de las tarjetas de regalo. Las tarjetas de valor almacenado son tarjetas de dinero prepagado y pueden ser eliminadas cuando el valor es utilizado, o el valor de la tarjeta puede ser cubierto, como es el caso de las tarjetas de llamadas telefónicas o cuando se utiliza como una tarjeta de viaje.
El término de tarjetas de valor almacenado de "circuito cerrado" significa que los fondos y/o datos son 'físicamente' almacenados en la tarjeta, en forma de código de datos binario, mientras que con las tarjetas de prepago se mantienen los datos en los ordenadores del emisor de la tarjeta. El valor asociado con la tarjeta se puede acceder mediante una banda magnética integrada en la tarjeta, en la que el número de tarjeta es codificada; el uso de identificación por radio frecuencia (RFID); o mediante la introducción de un número de código, impreso sobre la tarjeta, dentro de un teléfono u otro teclado numérico. En contraste, las tarjetas de valor almacenado de "circuito abierto" son tarjetas de pago de débito y crédito, tales como las tarjetas sin contacto de MasterCard, Visa payWave, American Express ExpressPay y Discover Zip.[2]