El Tratado de Troyes fue un acuerdo por el que el rey Enrique V de Inglaterra heredaría el trono de Francia a la muerte del rey Carlos VI de Francia. Fue firmado en Troyes, Francia, en el año 1420. Este tratado fue parte de las consecuencias de la batalla de Azincourt. Este intento de alterar el patrón tradicional de sucesión al trono de Francia no tuvo éxito.