El Tratado de Waitangi (en inglés: the Treaty of Waitangi, maorí: Te Tiriti o Waitangi) se firmó en Waitangi, en la bahía de las Islas (Nueva Zelanda), el 6 de febrero de 1840. Fue firmado por funcionarios de la Corona británica actuando en representación de la reina Victoria I, y por jefes maoríes de la isla Norte. El residente británico James Busby ya había convencido a aproximadamente 35 de estos jefes a que pretendiesen la independencia bajo la denominación de «Confederación de las Tribus de Nueva Zelanda». El documento rubricado en Waitangi fue después entregado a otras localidades norteñas para obtener firmas maoríes adicionales.
Este tratado, referido comúnmente por los neozelandeses como The Treaty, justificaba que los ingleses hiciesen de Nueva Zelanda una colonia británica. Hoy se considera el punto fundacional de Nueva Zelanda como nación.
No obstante, el gran problema radica en que se firmaron dos versiones, una en inglés y otra en maorí, y ambas tienen puntos discordantes. Por ejemplo, el uso de la palabra kawanatanga, que aparece en el Tratado para expresar el concepto de la soberanía. La versión maorí dice que ellos aceptan la permanencia de los británicos a costa de la protección permanente por parte de la corona. La versión británica dice que los maoríes se someten a la corona a cambio de la protección británica.