La influencia de la Antigua Grecia en el vino es importante no solo para la industria del vino griego sino para el desarrollo de casi todas las regiones vinícolas europeas y para la propia historia del vino. La importancia que la vinicultura tuvo en la sociedad griega antigua puede verse en una cita del historiador Tucídides: «los pueblos del Mediterráneo empezaron a emerger del barbarismo cuando aprendieron a cultivar olivos y vides».[1]
Los antiguos griegos fueron pioneros en nuevos métodos de viticultura y producción de vino que compartieron con las antiguas comunidades vinícolas en lo que actualmente es Francia, Italia y Rusia, así como otras a través del comercio y la colonización. Por el camino influyeron marcadamente en las antiguas culturas vinícolas europeas de los celtas, etruscos, escitas y finalmente los romanos.[2]